Seleccionar página

El 28 de abril quedará marcado a partir de ahora, no tan sólo por celebrar el Día Internacional de la Seguridad y Salud en el Trabajo, sino también por poner en valor a Gente Ejemplar en la Gala de Hospital Optimista.

Uno de esos días mágicos donde los sueños se hacen realidad, y donde corren risas y lágrimas al compás de las palmas sabiendo que juntos podemos hacer nuestro mundo mejor.

Una experiencia que vivimos desde su preparación, durante el viaje y a la llegada al destino con un mar de emociones y todas positivas.

No podéis imaginar lo que significo para mi la compañía de tantos y tantos amigos que se trasladaron a Valencia para acompañarnos ese día, algunos desde su butaca recordaban sus experiencias vividas. No me cabe la menor duda, que hubo una persona que miro el tatuaje de su muñeca 06:00 , esa señal que siempre le hace recordar que a seis horas estuvo ahora hace un año de decir adiós y que fueron profesionales de un hospital quiénes le salvaron la vida.

Otras desde Barcelona nos seguían con el corazón partio por no poder estar en Valencia, pero afortunadamente, la espera en esa sala de hospital iba a reportar muy buenas noticias.

Tras la gala, miles de WhatsApp de compañeros/as que enviaban ls fotos de sus hijos/as con la acreditación de hospital optimista durante la gala, nariz verde y una gran sonrisa.

Al día siguiente, al llegar al despacho, abrazos , besos y reconocimiento del Grupo hacia el trabajo bien hecho que nos hace sentirnos orgullosos de lo que nuestra marca nos permite hacer juntos por el mundo.

Gente Ejemplar que  contribuyen a la mejora de la salud de los pacientes hospitalizados fomentando las iniciativas y/ó prácticas que crean un entorno optimista para el paciente y su familia.

Testimonios como el de Susana Romero que nos dejo un post de su experiencia desde niña en el hospital en el hospital Materno  Infantil de Zaragoza dan sentido a los premios. Ella decía ‘Recuerdos de estos días no muchos, pero tengo flases, todos ellos muy buenos: de las enfermeras que colgaban mis dibujos en la pared para que los vieran mis padres, de un doctor que me leía cuentos, del camillero que me cantaba “Chiquitita” cuando me llevaban al quirófano, de mi inseparable muñeco “ET” .’

Otros que no han llegado a publicarse pero que merecen ser conocidos, como el de Leonor Soler, que tras su enfermedad decide montar una Empresa ONCOHELP que nace para que todos los enfermos oncológicos ingresen con la dignidad que merecen.

Durante estos días he tenido ocasión de hablar con los premiados, y con la asociaciones a las que se les ha cedido el premio económico, recuerdo cada una de esas llamadas, y las conversaciones que venían marcadas por una sonrisa a uno y al otro lado de la línea con emoción, y es que todos necesitamos ser reconocidos en nuestra labor.

Pero ahora me viene especialmente a la memoria la conversación con Lorena la Presidenta de AGAPREM porque tuvimos que dejar de hablar porque al fondo comenzó a sonar el llanto de un niño.

La semana pasada dos personas ejemplares, que me han traído los I PREMIOS DE HOSPITAL OPTIMISTA, Lary y Ana de Fundación ATRESMEDIA me contaban la iniciativa que llevan a cabo junto a las principales fundaciones, entidades y asociaciones vinculadas a la atención hospitalaria infantil (Junto a Fundación Atresmedia, Abracadabra, Aladina, Menudos Corazones, Pequeño Deseo y Theodora; la Asociación Española contra el Cáncer y la Federación Española de Padres de Niños con Cáncer). Todas ellas se han unido para instaurar

El 13 de Mayo Día Nacional del Niño Hospitalizado

Y hoy me gustaría pedirte que igual que te uniste a contagiar sonrisas con hospital optimista, hoy te sumes a

¡¡¡Lanzar un beso redondo para los niños hospitalizados !!!